Pero no todo fue juego, tambien tuvimos que laburar, el ministerio de la alabanza no es solamente tocar y que suene lindo, es mucho más que eso, y sinceramente el peso se sentía. Cuando estás ahi en el frente no te importa lo que los demás piensen o digan, lo único que te importa es lo que DIOS piense, y tu única oración es: "DIOS por favor, guiame, sin Ti no puedo hacerlo" ... y lo decís de todo corazón.
Creemos que DIOS nos usó y que Él nos va a seguir usando, es curioso pensar que hace 7 meses ni sabiamos tocar, y mucho menos nos hubieramos imaginado que ibamos a andar por Cordoba tocando, Él nunca deja de sorprendernos, creemos que cosas más grandes están por venir, y sabemos que hasta el final nuestra oración será "DIOS guianos, sin Ti no podemos"